domingo, 30 de septiembre de 2007

Rosa Violeta

Me llamo María Juliana Casadiego Iragorri, nací en Bogota – Colombia el 24 de Agosto de 1987, aunque soy más Caleña que Rola. Toda mi infancia la viví en la Bogota desalmada, sucia y no querida de los años noventas, pero esté caos llego también a mi casa, una situación desbordo a mi familia y mis padres se divorciaron. Mi madre decidió regresar a su ciudad natal con sus padres y mi papa decidió quedarse en la vieja Bogota que a penas empezaba a crear nuevas raíces.

Llegue a la sucursal de cielo o del caos, como dicen por ahí, a mis 10 años de edad, llena de temores y angustias por haberme embarcado en algo completamente ajeno y desconocido. El cambio de ambiente, de colegio, de amistades, de todo fue caótico, pero ahora que lo pienso fue lo mejor que me pudo haber pasado porque me hizo lo que soy ahora y amo lo que soy, con mis problemas y mi cabeza loca.

El divorcio de mis padres me genero una rebeldía incontrolable que en un principio se me estaba saliendo de las manos problemas en la casa y en el colegio con las materias y los compañeritos.

De Bogota venia de Colegio femenino y aquí llegue a colegio mixto, niños solo conocía a mis primos y uno que otro vecino, así que fue difícil la convivencia al principio con los niños pero aprendí a conocer su buena calaña y sus mañas.

La rebeldía paso con el tiempo, porque el tiempo cura todo y sana heridas que se creen imposibles de sanar y esos compañeritos nuevos que ahora adoro con el alma me ayudaron a ver el mundo color rosa violeta, es decir, con todo lo que implica pero buscando siempre alternativas positivas. El divorcio de mis padres es mas lo positivo que lo negativo que ha traído, he mejorado mi relación con ambos y tengo 3 hermanos maravillosos que nunca me han dejado perder la magia de ser un niño.

Desde pequeña aprendí sobre literatura con mi abuelo Efrain y me pare por primera vez en un escenario donde haciendo de la hija de un cuentero supe que me encantaba la actuación y todo lo que esta implicaba. Pero fue en Cali donde mi abuelo Genaro me instruyo en el arte de la poesía, y la vida, porque no tengo certeza de quien, en la pasión por el teatro y el cine, porque el cine es con lo que sueño y donde me sueño por el resto de mi vida.

Fui creciendo y en el camino me he encontrado con todo tipo de gente y lugares, algunos para recordar, otros para olvidar, pero todos han dejado algo. Del colegio me quedan esas amistades incondicionales y los trabajos fáciles y en la U me he encontrado con esas personas que tienen la misma pasión que vos por las cosas y con las que odian lo que hacen, con las mediocres y con los talentos naturales, con las amistades mas engañosas hasta las mas reales y con lo que realmente es el esfuerzo por hacer lo mejor.

En Cali he conocido lo que soy ahora, una amante del arte. Me encanta sentarme a observar, fotografiar cualquier cosa, ir a teatro o a cine así sea sola, bailar y ver bailar a los cuerpos al caminar y sentarme y respirar un poco del aire que también crea su danza en esta ciudad con su fragante brisa.

Amo y Odio a Cali por mí, por los otros, por el exceso, pero la verdad es más lo que la amo porque me acogió y me enseño la vida, la calle y su magia. Si me preguntan que soy ahora soy una mezcla de caos, irrealidad, alegría y vida.

2 comentarios:

Julián Pantoja dijo...

gracias Juli, por este pedacito de vos

Unknown dijo...

Juli, esa eres tú, abrazos! Pao Ch.